Se localiza adosado a la pared de una tribuna anexa al coro alto de la iglesia, en el lado del Evangelio. Sería obra de Fray Juan Velázquez Cincoya, en 1725, y habiendo sido intervenido en diversas ocasiones como la realizada en 1750 por Cristóbal García, en 1770 por José de las Casas, y supuestamente por D'Enoyer en el siglo siguiente. Ya pasados los años 80 del s. XX fue recuperado por Agustín Gómez Morales y Francisco Román Pérez, quedando operativo y en un estado aceptable hasta la actualidad.
Sobre la fachada frontal de su caja barroca se disponen siete castillos de la siguiente forma: Un cuerpo central compuesto por un castillo torreón central, dos torreones de base triangular e, intercalados, dos castillos planos. Ya, a ambos lados del cuerpo central descrito, se alzan sendos castillos planos con tubos de gran calibre para los contras, los cuales habrían sido añadidos en el s. XVIII.
Las fachadas laterales son planas y exentas de tubería.
Los orificios que se observan manifiestan que contó con una trompetería horizontal, actualmente desaparecida en su totalidad, la cual se desplegaba en abanicos bajo cada uno de los cinco castillos del cuerpo central antes mencionado, siendo de doble o triple fila los correspondientes a los dos castillos planos. Los tubos centrales de los castillos planos están estriados y los del castillo central tienen algún pequeño detalle decorativo, estando los labios de los tubos de contras rodeados con típicos mascarones.
Se accede al mueble por su trasera a través del cuarto de fuelles. Dispone de una consola en ventana con un teclado con transmisión mecánica y neumática, siendo mecánica también la transmisión de registros. La consola cuenta igualmente con dos grupos de tiradores de registros y trémolo, así como un pedalier y pedal de expresión.
Tras la consola aparece una cadereta de espalda, supuestamente ornamental, con una disposición de su cañería muy similar a la del cuerpo central de su fachada principal.